Son aquellos gastos prácticamente invisibles que terminan afectando el presupuesto.
Usualmente son los que dedicamos a temas de ocio, como por ejemplo los servicios de ‘streaming’ como Netflix, Spotify, HBO Max, Amazon Prime, etc.), la clásica: membresía del gimnasio, compras dentro de las aplicaciones del celular, etc.
Un buen consejo: antes de instalar o descargar la aplicación, pregúntate si esos gastos realmente son necesarios. Al tener la certeza, podrás llevar un mejor control de gastos, monitorear el presupuesto y hacer los ajustes necesarios.